 Ya sea que estés solter@ y teniendo citas, en una relación seria, o algunos años de matrimonio, la diabetes es una parte significativa de tu vida e inevitablemente tiene un impacto en las relaciones para bien o para mal. Hemos hablado específicamente de cómo la diabetes impacta en la vida sexual, pero hay tres formas en que la diabetes puede impactar en las relaciones en general.
1. Esconder tu diabetes
Si estas en el mundo de las citas románticas y estás escondiendo a propósito tu diabetes de la persona a la que estás viendo es porque tienes miedo de su reacción al verte pinchar tu dedo, al ver tu bomba de insulina, o verte inyectarte, estás escondiendo una parte importante de quién tu eres. Si la persona con quien sales no está a gusto con tu diabetes, o no desea aprender acerca de ella gradualmente con tu ayuda, entonces esa relación está condenada al fracaso. También, tú inevitablemente terminarás negando tu diabetes por medio de no dar las dosis adecuadas de insulina o pasar horas sin chequear la glicemia porque no quieres que esa persona sea testigo del evento.
Solución: La forma en que presentas tu diabetes a una nueva persona en tu vida es en gran parte el modo en como ella reaccionará ante ella. Si presentas tu diabetes como algo embarazoso, la persona pensara que es algo raro de lo que hay que avergonzarse. Si presentas la diabetes como algo que es parte de tu vida diaria y de lo que estás orgulloso, ellos verán que tu respuesta hacia la diabetes es algo impresionante y digno de admiración. Al final, si no le atraes a alguien por tu diabetes, entonces definitivamente esa persona no será una pareja que te apoye a largo plazo. Tú mereces una pareja que acepte cada parte de ti, y eso incluye tu salud.
2. No dejar que las personas te apoyen
Nadie quiere ser molestado por la persona que lo ama cuando se refiere a la diabetes, pero la persona que te ama quiere cuidarte, así como probablemente tú quieras cuidar de ella en algún otro aspecto. Si no tomas tiempo para explicar qué tipo de ayuda te gustaría recibir de tu pareja, entonces ella estará tratando desesperadamente de ayudarte de cualquier modo que pueda. Puede sentir que no lo estás dejando participar y tú te sentirás constantemente agobiado y molestado acerca de tu diabetes, como si estuvieran entrometiéndose y tratando de manejarte.
Solución: Explícale a tu pareja exactamente cuál es la mejor manera en que puede apoyarte. Por ejemplo: Quizás no te guste que te recuerden chequear tu glicemia, pero no te preocupa que te pregunten luego que el glucómetro te da un resultado, “cómo va todo cariño?”. De esta manera, tu pareja puede estar incluida (y pendiente de tu seguridad si tu glicemia está alta o baja). O puedes decirle a tu pareja qué hacer cuando la glicemia está baja: “cuando me baja el azúcar necesito que me consigas jugo rápidamente”, o “cuando me baja el azúcar necesito que me des algún espacio y no me hables mientras espero que el azúcar se normalice”.
3. Negar tu diabetes le hace daño a las personas que te aman
Cuando la persona que padece la diabetes actúa negligentemente a causa del cansancio que le provoca estar pendiente de su condición hiere a las personas que las aman. Mientras más fuera de control están las glicemias más se impacta a las personas a nuestro lado por nuestra enfermedad. Cada baja de glicemia trae preocupación, pánico y responsabilidad a nuestra pareja. Cada glicemia alta nos deja sintiéndonos mal e impacta la vida de los que nos rodean. A largo plazo, mientras más negligentes somos hacia nuestra diabetes, más al riesgo estamos para las complicaciones que dejarán a nuestras parejas sintiéndose más responsables de cuidarnos en el futuro. Se puede considerar muy egoísta el hecho de ser negligentes con la diabetes, y esto inevitablemente, lastimará a las personas alrededor tuyo. No es solo a ti.
Solución: Si estas luchando con el cuidado de tu diabetes solo, es tiempo de pedir ayuda. Ya sea que necesites más ayuda de tu pareja o ayuda médica profesional, el ignorar esta parte de tu vida va a causar más tensión en tus relaciones. Si necesitas terapia, ayuda con el control del azúcar o entrenamiento, toma este paso y busca ayuda por el bienestar de tus relaciones. Nadie ha dicho que la diabetes es fácil, pero hay personas que pueden ayudarte. Sálvate a ti mismo y salva tu relación.
| Tener citas con diabetes no es fácil y es un reto extra que las personas sin diabetes quizás no comprendan nunca, pero es importante que tu diabetes tenga la atención debida dentro de tu relación. Mientras más la escondas o la niegues, mayor será el problema en tu relación. Toma tiempo para educar a tu pareja y se paciente mientras aprende acerca de la diabetes, para que se convierta en una parte importante y confiable de tu cuidado propio. Tu relación será mejor como consecuencia de ello! |
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